Pasaje Clave: Jueces 19
HACIENDO LO QUE SE ME DA LA GANA 3
¿Cómo comienza esta nueva historia? (vs.1)
Las concubinas eran esposas. Esto se confirma por las expresiones “su marido” (vs. 3), “su suegro” (vs. 4) y “su yerno” (vs. 5), pero eran esposas de un rango inferior o de 2º “categoría”. Aún así, esta mujer concubina no resultó ser la mejor elección para el levita. “¿Y por qué no?”
Porque el ministerio del levita era un ministerio sacerdotal, de dedicación full a Dios. La pareja que él escogiera debería estar a la altura de ese llamado ministerial. Y claramente esta concubina no lo estaba.
El chico o la chica con quien quieres formar pareja, ¿te respeta, te valora, te cuida, te honra? ¿Entiende tu llamado y tu servicio a Dios?
Si uno de los dos no tiene bien en claro la importancia del servicio a Dios y del tiempo dedicado a Dios, entonces tendrán problemas. Piénsalo.
¿Qué hace ella? (vs.2)
Podemos explicar la infidelidad, pero no podemos justificarla. Nada justifica a una persona infiel.
A pesar de la infidelidad de ella, ¿qué hace el levita? (vs.3)
Semejante acción de perdón del levita, ¿qué produce en su suegro? (vs.4-8)
¡Claro! ¡No quería que se fueran! El suegro debe haber pensado: “Un yerno así vale la pena. Ama a mi hija, la perdonó, vino a buscarla, le dio una segunda oportunidad, la trata amorosamente…”.
Mmmmmm… el levita, ¿realmente la ama?
No nos apresuremos. Esperemos hasta el final.
Después de tanta hospitalidad, ¿qué decide hacer el levita? (vs.9-13)
Pero, llegada la noche, ¿con qué problema se encuentran? (vs.14-15)
¿Y de qué manera logran resolverlo? (vs.16-21)
Gracias a la hospitalidad y al corazón generoso de este anciano ellos pasan la noche en Gabaa, una ciudad israelita, perteneciente a la tribu de Benjamín. Hasta aquí, todo bien.
HACIENDO LO QUE SE ME DA LA GANA 4
Pero, entrada la madrugada, ¿cómo reaccionan los perversos hombres de Benjamín cuando se enteran que habían llegado “visitas”? (vs.22)
La palabra “conocer”, en el idioma hebreo, significa “conocer sexualmente a alguien”, “conocer mediante una relación sexual”. ¡Querían sexo!
Algunas sociedades antiguas humillaban a los extranjero mediante la violación homosexual, ¡pero el levita no era un extranjero! Todos eran israelitas, todos pertenecían al pueblo de Dios, y las prácticas homo- sexuales estaban totalmente prohibidas.
Estos israelitas no solo habían sacado a Dios de sus vidas sino que también se habían contaminado con las prácticas sexualmente perversas de las naciones paganas que los rodeaban. Vivían como se les daba la gana.
¿Qué sucede y qué hacen los perversos de Benjamín? (vs.23-26)
. Sexo oral, anal o vaginal con tu novia o novio es pecado. ¡Está mal!
. Sexo homosexual femenino o masculino es pecado. ¡Está mal!
. Pornografía es pecado. ¡Está mal!
. Manoseos, caricias de genitales o en la cola es pecado. ¡Está mal!
. Abusos, violaciones y todo tipo de violencia sexual es pecado. ¡Está mal!
. Iniciarte sexualmente con prostitutas es pecado. ¡Está mal!
. Incesto es pecado. ¡Está mal!
. Tríos sexuales, orgías, es pecado. ¡Está mal!
Lee más acerca de abusos sexuales, infidelidades y perversiones en “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Génesis Edición Extendida. Días 28 y 44”, en “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: 2º Samuel. Días 13, 15 y 16”, en “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: 1º Reyes. Día 14”, en “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: 2º Reyes. Día 18” y en “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: 1º Crónicas. Día 3”.
HACIENDO LO QUE SE ME DA LA GANA 5
¿Cómo termina esta terrible historia? (vs.27-31)
Lo que comenzó siendo una aparente historia de “amor” entre el levita y la concubina, termina siendo una historia macabra, despiadada. Y aquí se revela que el levita no la amaba, tal vez la necesitaba… pero nunca la amó.
En lugar de protegerla y cuidarla, ¿qué hace con ella? (vs.25)
Y luego de la violenta y aberrante violación, ¿cómo la trata? (vs.27-28)
Y finalmente, en lugar de llorarla, hacer duelo por ella y enterrarla, ¿qué salvaje decisión toma? (vs.29-30)
El que ama de verdad jamás actuaría como ese insensible y frío levita.
No te confundas. Que alguien te necesite no significa que te ame.
Extracto del Libro Desafíos para Jóvenes y Adolescentes Jueces.
Por Edgardo Tosoni.
