En algunos hospitales de Guatemala, cuando un bebé nace, le manchan los pies con una almohadilla que se utiliza para entintar y poner sellos en las cartas ¿Con qué propósito lo hacen? Para impregnar una imagen de las plantas de sus pies sobre una cartulina, en donde además, colocan una foto del bebé. Al momento esas impresiones no tienen mayor valor. Pero sí que lo tienen cuando el bebé tiene 18 años y sus pies miden ahora muchas veces más.
Pero la pregunta típica de un niño al ver las impresiones de sus manos sobre una cartulina es ¿Qué son todas es líneas papa? Se refieren a las líneas que al acercar nuestra mano a los ojos podemos ver. La piel en nuestras manos no es lisa. Tiene muchas líneas y minisurcos. Como las vemos tan seguido, dejamos de pensar en ellas. Una huella dactilar, es la impresión, de lo que los profesionales llaman crestas papilares, de un dedo sobre una superficie. Generalmente utilizan el dedo índice o el pulgar para fichar a alguien.
La autenticación biométrica es común en nuestros tiempos. Esta consiste – entre otras formas – en utilizar la impresión de nuestras huellas dactilares para el reconocimiento automático de una característica única, en este caso de nuestras huellas dactilares. ¿Cuántas millones de millones de personas existen en el mundo? Y sin embargo, ninguno tiene un set de huellas dactilares iguales, estas son únicas.
Único, es una palabra que quiero que guarde en su mente. Dios el creador nos diseñó a cada uno de nosotros para ser únicos. No existe nadie más en el mundo que sea exactamente igual a nosotros. Me parece algo muy triste que habiendo sido creados únicos, queramos vivir como copias idénticas de otros. Todos necesitamos modelos, pero nunca debemos ser copias. Sus huellas dactilares lo gritan en silencio, usted es único. Sea usted.
No me refiero a aquellos que dicen “Yo no vivo para complacer a nadie, yo sólo vivo mi vida. Si me quieren bueno, si no, que den media vuelta». Imagine que eso dijera el Policía, que eso dijera el papá, la mamá, el jefe, el presidente, el maestro o el cocinero, el mundo sería un desastre. Viviríamos egoístamente, pensando sólo en nosotros, olvidándonos de los demás y atropellando sus vidas. Vivir así es olvidar la Regla de Oro de poner nuestro rostro en el rostro de los demás y de tratarlos como deseamos ser tratados.
Cuando le digo que usted es único y que sea usted. No me refiero a que viva como quiera, como si fuera el único mortal en esta tierra. Me estoy refiriendo a que lo que usted es y lo que proyecta, sea uno. Si Dios lo creó único, no se convierta en una copia barata de otros. No viva el guion de su todo, imitando a quien admira o quien es su modelo. El momento que comienza a vivir el guion exterior de otra persona que usted admira, usted se convierte en un actor, esclavo del guion e incapaz de disfrutar la libertad de ser el mejor usted que puede ser.
Cuando usted se comporta de cierta manera y proyecta una imagen de lo que usted no es, siempre va a vivir con el temor de que conozcan a su verdadero yo. ¡Qué estrés! Vivir todo el tiempo proyectando lo que no soy, actuando, aparentando y todo con el fin de ser aceptado. Creyendo que el valor es ser como alguien más, una copia, cuando usted es original, único.
Cuando usted es usted, impacta con sus fortalezas, es genuino y no tiene que esconder nada. Pero esconder su verdadero yo, produce ansiedad y miedo. Le voy a dar uno de los mejores secretos para hablar en público, sea usted. Mientras más sea usted, más podrá comunicar a través de su personalidad.
Cuando nos olvidamos que somos únicos, nos convertimos en copias baratas, esclavizadas de un guion distinto para el que fuimos creados, para complacer a otros, que muy probablemente, también están viviendo para complacer a otros. Sea original, sea usted, sea auténtico, pretender ser alguien más, le producirá estrés, miedo y le robará las energías. El verdadero usted es con el que está más cómodo, es el estado natural de su persona y generalmente aparece cuando nadie lo ve.
Recuerde que no le estoy diciendo que viva como quiera, viva la Regla de Oro siempre, pero no viva aparentando ser lo que no es. Que lo que usted es y proyecta sean uno.
En lo personal, la paz para ser lo que yo soy, es saber que existe un Creador, que yo soy su creación, que le pertenezco, que me creó para servirle, que soy un pecador y por su justicia condenado a muerte, pero que por su amor envió a Jesús a vivir la vida que no podía vivir y a cumplir con todos sus mandamientos y preceptos, para que muriera en la cruz en mi lugar. El lugar que me pertenecía ante Dios como pecador, lo tomó Jesús, él intercambió lugares conmigo para darme vida y libertad. He reconocido que soy un pecador, me he arrepentido de mis pecados, he creído que la obra de Jesucristo en la cruz me da el perdón de pecados, me libra de la condenación y me lleva a amarlo no por temor sino por gratitud. Y el día que muera no será mi fin, será el inicio de una eternidad junto a su lado. Eso me hace libre para vivir tranquilo, siendo yo, soy aceptado por Dios y no hay opinión más importante que esa. No soy una copia y aunque admiro y aprendo de muchos, soy yo, soy único. Mis huellas dactilares y mi rostro, lo gritan en silencio.
Meta #4: Sea auténtico. No sea una copia, ni aparente ser lo que no es.
Desafío #4: Identifique todo aquello que está proyectando que no es usted. Cambie la proyección o cambie el interior. Pero asegúrese que su realidad interior y su imagen exterior, sean copias idénticas.
Extracto del libro Metas de la Vida
Por Alex López