“Nadie muestra, amor por mí en ninguna manera, así que yo voy a hacer lo que hay que hacer. “

La falta de comunicación entre padres e hijos, le está dicien­do a los hijos: “Nadie te oye.” Entonces aparecen los novios o novias que están más dispuestos a oírlos que sus padres o madres, y así empiezan a hallar amor básico y aceptación de sus compañeros.

Nuestra cultura dice, “Si tú me amas, debes tener relaciones sexuales conmigo.” Los adolescentes escriben constantemen­te acerca de su confusión respecto a la diferencia entre amor y sexo. El deseo de ser oídos los lleva a la necesidad de ser amados, lo cual los lleva a practicar las relaciones sexuales co­mo una expresión de esa necesidad.

Si los padres pudieran detectar la necesidad de sus hijos de ser amados, podrían ayudarlos a no volverse al novio o a la novia para tratar de hallar amor a través del sexo prematrimonial.

Si los adolescentes comprendieran que ellos pueden sen­tirse bien respecto de sí mismos sin comprometerse en re­laciones sexuales, se evitaría un montón de embarazos ju­veniles, y los adolescentes no tendrían que acudir a sus compañeros por sexo prematrimonial. Ellos podrían simplemente decir no.

Diane es una chica corriente de 16 años. Va a la es­cuela y tiene un trabajo de medio tiempo. Sus padres la aman, pero no saben como demostrárselo. Aunque ellos tratan de hacerlo, ella no lo percibe. Entonces ella se vuelve

a su novio y comienza a tener sexo con él para hallar amor y seguridad. Algunos jóvenes de hoy tienen la necesidad de ser sexualmente activos, para sentirse aceptados y de­seados. Pero, ¿qué es lo que realmente los motiva?

Podría ser que lo hacen para herir a sus padres, porque se sienten abandonados e ignorados y saben que sus padres serán heridos al saber que ellos duermen con alguien.

 La mayor razón por la cual los adolescentes se invo­lucran en sexo es porque sienten la necesidad de ser ama­dos. Esto se expresa muy bien en la manera en que un chico joven siente amor por su madre. Si la mamá sos­tiene, acaricia y muestra afecto por el niño, entonces el niño sabrá que su madre lo ama. Así es como piensa una gran cantidad de adolescentes. Si alguien les muestra afecto teniendo sexo con ellos, entonces ellos sienten que la per­sona debe amarlos, o por lo menos cuidan de ellos. Por supuesto esto no es siempre cierto, y muchas veces la per­sona termina siendo realmente lastimada.

 La búsqueda de un amor constante lleva a muchos jó­venes a practicar sexo, al no sentirse amados por parte de su familia, ellos exploran nuevas avenidas para satis­facer esa necesidad. Al sentirse indignos y descuidados, muchos jóvenes tratan a sus cuerpos y a sí mismos de la misma manera.

Otra razón, que es raramente expresada, pero que su­cede a menudo, son los problemas familiares. Se sienten indeseados por parte de miembros de sus familias, y cuan­do se involucran en sexo se sienten deseados y parte de alguien. La muerte de alguien en la familia deja a menu­do a algunos tan deprimidos que necesitan tener el senti­miento de amor que va junto con la actividad sexual. Ne­cesitan ese sentido de seguridad.

 Algunos se sienten abandonados de sus padres y fami­liares, y entonces se vuelven a los malos lugares, por lo que ellos piensan es amor, y tienen sexo para sentirse de­seados y necesitados.

Ellos tienden a buscar cualquier clase de afecto que ven, para que tome el lugar de la falta de amor que han expe­rimentado. Esto me recuerda a una chica joven que co­nozco a quien le es difícil relacionarse con jóvenes sin in­volucrarse sexualmente. Ella tiene un típico ambiente fa­miliar, pero le falta una cosa—el amor de un padre.

Extracto del libro “Lo Que Deseo Que Mis Padres Sepan Acerca de mi Sexualidad”.

Por Josh McDowell.

Lee Sexo y sexualidad – Los adolescentes se vuelven a otros en busca de aceptación 2

 

 

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí