1. EL CREDO DE LOS APÓSTOLES.
Cuando este credo simplemente se recita, a menudo carece de sentido. La versión siguiente es buena para usarla con jóvenes o adultos en una experiencia de adoración creativa. Un grupo leerá la parte que está en negrita, y el otro, la respuesta que le sigue. (Larry Houseman).
Creo en Dios Padre Todopoderoso, creador del cielo y la tierra…
hacedor de todas las personas sin distinción de razas ni colores, negras, morenas, amarillas y blancas.
Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor…
Concebido por obra y gracia del Espíritu Santo…
Para vivir en la eternidad.
Nacido de la virgen María…
Para vivir en la tierra.
Padeció bajo el poder de Poncio Pilato…
el tuyo y el mío.
Fue crucificado, muerto y sepultado…
Pero al tercer día resucitó de entre los muertos…
Subió a los cielos, y está sentado a la diestra de Dios, Padre…
Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos.
Y entre ellos estamos tú y yo.
Creo en el Espíritu Santo…
Presente en el tráfico de las cinco en punto.
Presente en las discusiones familiares.
Presente en los matrimonios.
Presente en las vidas de aquellos que reciben ayuda social.
Presente en la gente de China, América, Rusia, y África.
Presente en esta congregación y presente en mi persona.
Creo en la iglesia como Cuerpo de Cristo…
Que incluye a todos aquellos que le han entregado sus vidas a Jesucristo y viven bajo su Señorío, sin importar su denominación.
Creo en la comunión de los santos…
Aquellos que viven amando y honrando a Dios, comprometidos con sus valores y principios de santidad.
Creo en el perdón de los pecados…
Para todos aquellos que se arrepienten y los confiesan, y se apartan para honrar a Dios con sus vidas.
Sean líderes de la comunidad que han pecado.
Sean aquellos que esparcen rumores y chimentos.
Sean aquellos inconstantes.
Sean profesores orgullosos, o matones violentos.
Sean criminales, o prostitutas.
Sean pastores o sacerdotes.
O sea yo mismo.
Creo en la resurrección de los muertos…
Algunos para vida eterna,
Y otros para juicio y castigo eterno.
Creo en la vida eterna…
Y en mi propia resurrección, por tu poder.
(Todos) AMÉN
2. EL PADRENUESTRO.
Esta oración de Jesús se repite tantas veces durante los servicios en una iglesia que, a menudo, pierde su significado. La lectura, a continuación, está diseñada para que la gente piense más en el significado del Padrenuestro mientras se repite en la adoración. (Donald M. Topp).
LÍDER: Padre nuestro
GENTE: una persona real, que le importamos y que nos ama.
LÍDER: Que estás en los cielos
GENTE: Viviendo en un lugar más alto que yo, entendiendo más que yo.
LÍDER: Santificado sea tu nombre
GENTE: honramos y adoramos tu santo nombre.
LÍDER: Venga a nosotros tu reino
GENTE: sí, ven rápido Señor Jesús, vive en nuestras vidas.
LÍDER: Hágase tu voluntad
GENTE: siempre sabes qué es lo mejor para nosotros.
LÍDER: En la tierra como en el cielo
GENTE: como siempre lo has hecho y siempre lo harás.
LÍDER: Danos nuestro pan de cada día
GENTE: siempre has suplido nuestras necesidades.
LÍDER: Perdona nuestras deudas
GENTE: nosotros las reconocemos y las confesamos.
LÍDER: como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden
GENTE: elegimos perdonar incondicionalmente.
LÍDER: no nos dejes caer en tentación
GENTE: danos la fuerza para resistir.
LÍDER: Más líbranos del mal
GENTE: cuando fallamos, tú vienes.
LÍDER: porque tuyo es el reino
GENTE: en el cual compartimos.
LÍDER: y el poder
GENTE: más grande de cualquier cosa que hayamos conocido jamás.
LÍDER: Y la gloria por todos los siglos
GENTE: Amén.
Extracto del libro Reuniones Creativas Para Refrescar tu Ministerio
Por Autores Varios