LOS ANCIANOS ABRAZANDO LA SABIDURÍA.
¿Cuánto tiempo hace que no visitas una casa de ancianos o un asilo de retiro? Cada año un grupo de amigos formamos equipos multidisciplinarios, diseñamos un plan de asilos y en un día visitamos dos o tres hogares.
Es impresionante la necesidad que ellos tienen a diario. No solo son los desafíos económicos, en los que se puede apoyar reuniendo alimentos, ropa y frazadas. Hay cantidad de trabajo y cosas que hacer en los asilos, como pintarlos, mejorar las condiciones de las habitaciones, reparar daños menores como cerrojos, tuberías o grifos.
También puedes hacerte cargo de preparar los alimentos de ese día y ayudar a alimentar a los que ya no pueden hacerlo por sí solos.
Puedes apoyar al personal de enfermería en sus labores, ayudar en el momento de bañarlos, vestirlos, peinarlos y hasta repartir sus medicamentos.
Quizás no tengas los fondos para comprar todo y deseas continuar apoyando a largo plazo. La manera más fácil y duradera es hacer «gestión». Puedes escribir cartas a empresas que deseen donar alimentos, ropa, frazadas y otras cosas que necesiten de manera periódica, creando un informe del asilo y sus necesidades básicas. Esto te dará la oportunidad de apoyar a largo plazo y saber que no fue solamente una visita de lástima sino de apoyo continuo.
Hay mucho trabajo por hacer, continuamos con la jornada.
Extracto del libro 50 Proyectos Sociales Para jóvenes.
Por Mark Orellano.
Lee Proyectos – Regalos para los ancianos