¿CÓMO HABLAR DE JESÚS CON EL MUNDO POSTMODERNO?
Nuestra tarea es presentar la fe cristiana vestida con palabras modernas, no es propagar el pensamiento moderno vestido con palabras cristianas. La confusión en cuanto a eso es fatal (J. I. Packer)
La misión evangelística dentro del ministerio juvenil está atravesando hoy por una emocionante turbulencia. Me parece que estamos a punto de despertar a una cruel observación y una inquietante pregunta. Llegó el momento de darnos cuenta de que lo que antes funcionaba hoy ya no funciona. Por lo tanto, la interrogante que surge es: ¿Qué hacemos al respecto?
Estoy hablando de metodología. La manera en la que solíamos hacer evangelismo ya no tiene sentido hoy, no da resultados, no provoca lo que antes lograba. Se trata de una cuestión de forma, de estrategia.
El evangelio de Jesucristo sigue siendo la verdad inmutable que trae esperanza y salvación al ser humano, confronta al pecador y le presenta la gracia de Dios. Esto jamás cambiará. Sin embargo, la manera de comunicarlo sí tendrá que ser diferente, puesto que los oyentes son diferentes ahora. Su mundo, su mentalidad y sus necesidades son incomparables a las de otras generaciones.
Nos encontramos en un punto de la historia en el que veremos muchos intentos, algunos buenos y otros sinceramente equivocados. Algunas propuestas serán muy creativas, algunos métodos resultarán llamativos, y ciertas ideas quizás sean muy agresivas. Veremos una gama de innovaciones en la manera de presentarle el evangelio a la sociedad postmoderna. ¡Qué bien! Debemos hacerlo. Necesitamos intentarlo. Fracasaremos algunas veces. ¿Y qué? No hay mayor fracaso que no hacer nada.
La misión sigue siendo la misma: predicarle el evangelio a toda criatura (Marcos 16:15). ¡Los líderes estratégicos y audaces irán al frente en este llamado!
- En una escala del uno al diez, ¿qué tanto te consideras una persona evangelística? ¿Cómo describirías tu vida de evangelismo?
- Del uno al diez, ¿qué tanto están tus jóvenes compartiendo su fe? ¿Por qué?
- ¿Cómo sería idealmente un grupo de jóvenes muy evangelístico?
- Si no fueras cristiano(a), ¿qué pensarías de tu grupo de jóvenes? ¿Qué sería lo que te impactaría (bueno o malo)?
¡DE LAS TÉCNICAS Y LOS DISCURSOS A LAS RELACIONES QUE TRANSFORMAN!
Por mucho tiempo en el ministerio juvenil nos hemos encargado más de los programas y menos de las personas. Quizás dos de las áreas que más se han resentido son el evangelismo y el discipulado.
- ¿Qué métodos o programas evangelísticos está utilizando tu ministerio ahora?
- ¿Cuáles son los resultados de estos esfuerzos?
- ¿Qué métodos o programas te gustaría implementar? ¿Qué necesitas para ello?
Los programas son buenos solo si sirven para mover a las personas desde su realidad actual hacia la voluntad de Dios para sus vidas. Por lo tanto, estoy convencido de que las actividades evangelísticas serán de mucho valor si permiten que tus jóvenes compartan su fe con sus amigos y demás relaciones.
Recuerda, la expectativa de Dios es que tú y tus jóvenes sean verdaderos testigos; que juntos aprendamos a amar al mundo con compasión y a presentarles el evangelio. Si para ello necesitas implementar actividades evangelísticas, ¡adelante! Sin embargo, ten cuidado, podrías programar reuniones evangelísticas y no lograr que tus jóvenes sean verdaderos testigos.
Te recomiendo visitar los sitios de Evangelismo Explosivo Internacional (www.eeinternational.org y www.xee.org). En ellos podrás conocer acerca de excelentes capacitaciones en cuanto al evangelismo en tu país.
NO A LA RELIGIÓN, SÍ A LA ESPIRITUALIDAD
Una de las características más evidentes de nuestro mundo hoy es el creciente interés por «la espiritualidad». Parece que todo el mundo le da ahora mucha importancia a este tema… pero a su manera.
- ¿Viene a tu mente algún personaje de la farándula que haya dado, hace poco, declaraciones de este tipo?
- ¿Viene a tu mente algún joven o señorita de tu comunidad que piense de manera similar?
- ¿Cómo definen hoy las personas los términos «espiritualidad», «religión» y «relación con Dios»?
- ¿Qué te parecen esas ideas frente a la declaración de Jesús en Juan 17:3?
Esta realidad pone de manifiesto una crisis que enfrentamos y una oportunidad que no debemos perder.
LO MALO
- La religión organizada ha fallado en comunicar la vida abundante que Jesús ofrece.
- Nuestras actividades cristianas, dentro o fuera de la iglesia, no parecen relevantes para el mundo de hoy.
- Modelamos una espiritualidad basada en meras normas religiosas y no en una reconciliación con Dios.
- ¿Qué otras manifestaciones de la crisis actual vienen a tu mente?
LO BUENO
- Individualmente podemos reflexionar acerca del verdadero significado de la espiritualidad y modelar el evangelio en persona.
- A través de las relaciones personales podemos generar conversaciones que desemboquen en temas espirituales.
- Es posible profundizar más por medio del diálogo y exponer verdades bíblicas a través de una comunicación a largo plazo (esto va más allá del tiempo limitado de los eventos o las campañas evangelísticas).
- ¿En qué otras oportunidades puedes pensar?
Extracto del libro “Estratégicos y Audaces”
Por Howard Andruejol
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