Continuemos.
Aislamiento Ladrón.
Ella charlaba conmigo (Daniela) sobre su crisis. Me contó de qué manera su estudio, su familia y sus amigos habían pasado a un quinto plano a consecuencia de su noviazgo. Al principio era maravilloso, el mundo parecía estar ocupado sólo por ellos; sin embargo, con el tiempo esto terminó haciéndoles mal.
El aislamiento te roba temas de conversación, quita la oportunidad de intercambiar experiencias con otros y te impide experimentar sentimientos distintos a los de pareja. Ella no lo notaba al comienzo, pero pronto reconoció que a la lista de olvidos debía agregar a Dios. Si quitas a Jesús del centro de tu relación, o si nunca lo ubicaste ahí, pronto notarás que el equilibrio se pierde y comienzas a dar tumbos con tu pareja. Lamentablemente, algunos se acostumbran y subsisten; pero, tarde o temprano, la situación puede ponerse fea.
Aislarse también tiene otro peligro latente: Las crisis podrían sorprenderte lejos de alguien dispuesto a darte una mano. En cada posibilidad que tenemos, animamos a muchachos y muchachas a vivir rodeados de personas que los amen con amor genuino. Personas que, con más experiencia que ellos y con más años de caminar junto al Señor, los ayuden a percibir la vida desde otro ángulo. A estas personas las llamamos referentes o mentores. También pueden conocerlos como guías, pastores o hermanos mayores.
En este caso el nombre es lo de menos, lo importante es que estén presentes con mucho amor y gracia de parte de Dios y que presten su oído para escucharte y aconsejarte sabiamente. Creemos que todo cristiano debería contar con una persona que cumpla este papel, alguien a quien pedirle orientación y también rendirle cuentas. Nosotros la tenemos, y es muy bueno contar con su ayuda, también en asuntos de pareja. Una buena idea es asistir a retiros de novios o leer juntos algún buen libro sobre el tema.
Lo mejor de todo es tener un matrimonio amigo que los ame y que pueda dedicarles algo de tiempo. Una pareja que se note que ama a Dios y a las personas. Al principio yo (Germán) me resistía un poco a esto; Dani me ayudó a darme cuenta de lo valioso de encontrar personas auténticas y comprometidas con nosotros que, con mucho respeto, tuvieran acceso a nuestra intimidad para darnos una buena mano. Hoy le agradezco a Daniela haber insistido sobre esto.
Principios Importantes.
- Las relaciones que no se definen con nombre y propósito pueden parecer divertidas al principio pero terminan causando dolor.
- Aislarse es peligroso porque te deja distanciado de tus amigos, y lejos de ayuda oportuna.
- Elegir a una pareja que los acompañe en su proceso de noviazgo será una decisión muy inteligente.
Preguntas que merecen respuestas.
- ¿Ya conversaron sobre qué esperan de la relación?
- ¿Cuáles son sus planes y sueños? ¿Cómo se acompañarán para que ambos alcancen su propósito en la vida?
- ¿Cuál es la pareja que puede acompañarlos en su noviazgo?
Oración.
Señor; quiero pedirte que me ayudes a no postergar conversaciones que son necesarias. Cuando llegue el momento (si es que todavía no llegó), permíteme hablar con libertad acerca de nuestras expectativas, sueños, principios e ideas. Te pido también que vayas poniendo en nuestra mente y corazón el nombre de un matrimonio que podrá acompañarnos en la vida de pareja. Señor, quiero serte fiel y cuidar a quien esté a mi lado.
Extracto del libro “El Amor de mi Vida ¿Quién Será?”
Por Germán y Daniela Ortiz