¿De Qué Se Trata?: Camino sin camino es un juego que sirve para ilustrar lo importante que es la guía del Espíritu Santo en nuestra vida.
Pídeles a los jóvenes que formen parejas. Uno de los integrantes de la pareja se vendará los ojos y el otro se pondrá detrás de él y lo tomará de los hombros.
Invita a las parejas a caminar libremente por donde deseen. El participante con los ojos vendados se dejará guiar por su pareja que, sin soltarlo de los hombros, lo guiará.
Luego de unos minutos, pídeles que intercambien lugares. El vendado guiará y quien guiaba se vendará los ojos.
Luego les preguntarás:
- ¿Qué se siente caminar vendado y qué se siente dirigir a una persona vendada?
- ¿Qué fue lo que te resultó más sencillo, guiar o dejarte guiar? ¿Por qué?
Llévalos a pensar que en nuestra vida diaria necesitamos confiar en la guía del Espíritu Santo, especialmente en esas circunstancias «a oscuras» en las que tenemos que tomar decisiones muy importantes y no tenemos en claro qué hacer.
Desafíalos a creer en el Espíritu Santo y a dejarse conducir por Él.
Por Giovanni Cabrera
