Pasaje clave: 1º Crónicas 15

¡Y se va la segunda! ¿La segunda? ¿Qué segunda?

La segunda tentativa de David de traer el arca del pacto a Jerusalén. Sin embargo, en esta oportunidad, hizo las cosas bien, respetando las indicaciones que Dios había dado para llevarla o traerla. Pero antes trasladar el arca, ¿qué es lo que prepara David? (vs.1)

Recuerda que todavía no había templos, solo tiendas. Hoy hay una “tienda” muy especial en la que Dios elige habitar: nuestras vidas. Si Jesús vive en tu corazón, si le entregaste tu vida a él, tú eres su templo.

¡Escucha! Cuando vas al colegio, cuando practicas deportes, cuando estás con tus amigos, cuando sales con tu novia/o, ¡llevas a Dios en tu vida!¡Llevas a Dios contigo a todas partes! Eres templo de Dios en tu casa, en la iglesia y en la calle. Eres templo de Dios en la esquina con tus amigos, en un boliche (club nocturno), o en la reunión de tu iglesia. (Y no estoy diciendo que esté bien que vayas a un boliche).

¿Qué haces? ¿A dónde vas? ¿Con quiénes te reúnes? ¿Qué hablas, qué miras, qué tocas, qué o a quiénes usas? ¡Entiende! ¡Eres templo! ¡Llevas a Dios contigo! No llevas la Biblia… ¡Llevas al Dios sobrenatural y magnífico! Este único pensamiento en tu cabeza debería servirte para decirle “¡No!” a ciertos lugares a los que Dios jamás irá.

“¡No!” a ciertas personas con las que Dios jamás se relacionará porque con su estilo de vida lo rechazan.

“¡No!” a ciertas decisiones que Dios jamás aprobará.

“¡No!” a ciertas conductas que Dios nunca bendecirá.

“¡No!” a seguir teniendo sexo con tu novia/o, o con la primera persona disponible que se cruza en tu camino.

“¡No!” a seguir fumando, consumiendo o inyectándote.

“¡No!” a vivir tomado y borracho cada fin de semana, echado sobre tu propio vómito.

“¡No!” a seguir siéndole infiel al hombre o la mujer que Dios puso en tu vida.

“¡No!” a seguir castigando tu cuerpo con dietas obsesivas.

“¡No!” a seguir maltratándote a ti misma con conductas anoréxicas o bulímicas.

¡Basta! Hoy tienes que decir: “¡Basta! Hasta aquí llegue. No más. Soy templo del Dios altísimo. Soy casa de la presencia poderosa y santa del Señor”.

Extracto del libro “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: 1º Crónicas”

Por Edgardo Tosoni

Descárgate GRATIS “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: 1º Crónicas”. HAZ CLICK AQUÍ.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí