Pasaje Clave: Mateo 25

Mateo nos presenta a continuación tres relatos exclusivos: la parábola de las 10 vírgenes, la parábola de los talentos y el juicio final cuando Jesús regrese. ¿Estás listo para empezar? Vamos…

LAS DIEZ VÍRGENES

¿A qué compara Jesús el reino de los cielos? (vs.1).
¿Cuál era la intención de las vírgenes? (vs.1).
¿Cómo se las identifica? (vs.2).
Prudentes significa que eran mujeres sabias. Ya verás por qué.
Insensatas significa que eran ignorantes, estúpidas, descuidadas.

¿Qué fue lo que no hicieron estas mujeres a diferencia de las prudentes? (vs.3-4).
¿Entiendes? El esposo estaba por llegar y ellas no querían perderse la fiesta. Y como estaba oscureciendo las diez mujeres tomaron lámparas para alumbrarse y ver el camino, pero las prudentes también llevaron aceite para mantener sus lámparas encendidas. Las insensatas, no.

¿Qué fue lo que sucedió? (vs.5-9).
Llegó el esposo y las prudentes estaban preparadas para recibirlo. ¿Y las insensatas? ¡¡No podían prender sus lámparas porque se les había terminado el aceite y no tenían más!!

¿Qué hacen? Van a pedir, pero nadie puede darles, y mientras salen a comprar, ¿qué sucede? (vs.10-12).
La estupidez, el descuido, la ignorancia, les hizo perder la fiesta y la oportunidad de celebrar con el esposo.
Ellas fueron las únicas responsables de haberse quedado sin nada.
Puedes culpar a todo el mundo, puedes criticar, puedes llorar, lamentarte y actuar como víctima, pero si eres descuidado, ignorante, estúpido, insensato, el único responsable serás tu mismo.
El esposo es Jesús (vs.13). Él vuelve pronto. ¿Estás preparado para recibirlo?

LOS TALENTOS

Y ahora, ¿con qué compara Jesús el reino de los cielos? (vs.14).
¿Cómo distribuye los talentos entre sus siervos? (vs.15).

¿Por qué a unos les dio más que a otros?
Porque no todos tenían la misma capacidad. Recibimos en la medida de nuestra capacidad… ¡pero siempre podemos crecer, aprender y mejorar para recibir más!!
¿Qué hacen los siervos con sus talentos? (vs.16-18).
Bien. Los dos primeros siervos multiplican sus talentos. Se esforzaron y trabajaron para obtener el doble de lo que habían recibido.

¿Quieres más de lo que tienes?
¿Quieres obtener lo que aún no tienes?
Decídete, esfuérzate y trabaja. Paga el precio de invertir tiempo, esfuerzo, fe y obtendrás resultados extraordinarios.
Pero, ¿qué hizo el tercer siervo? Escondió en un pozo su talento, su oportunidad, su bendición.
¡Nunca entierres tus sueños! ¡Nunca sepultes tus oportunidades! ¡Nunca escondas tus talentos y dones! ¡Nunca desprecies una bendición! ¡Nunca!

¿Qué sucede cuando regresa el dueño? (vs.19-23).
¡Recompensa a los dos primeros siervos! Los aprueba, les da mayor autoridad poniéndolos sobre mucho más y los honra. ¡Wooww! Eso está bueno. Se lo ganaron por trabajo, esfuerzo, fe y determinación.

¿Pero qué sucede con el siervo “enterrador” de talentos? (vs.24-30).
Termina mal. Pierde aun lo poco que tenía, se queda sin nada. Es humillado y despreciado. ¿Por qué?
Porque escogió el camino más fácil: darse por vencido aun antes de comenzar. Echarse a dormir y a lamentarse de sí mismo, mientras los otros dos trabajan y se esforzaban por más. Despreciar el talento que recibió al enterrarlo. Con su talento enterró también sus oportunidades, su propia vida y su futuro. Piénsalo. No hagas lo mismo con tu vida.

EL JUICIO

¿Qué hará Jesús cuando vuelva? (vs.31-33).
Ovejas: Aquellos que le entregamos nuestra vida al Señor Jesús.
Cabras: Todos aquellos que lo rechazaron y lo despreciaron.

¿Qué recompensa les da a las “ovejas”? (vs.34-36).
¿Y por qué motivos los recompensa así? (vs.37-40).
¿Qué castigo reciben las “cabras”? (vs.41). ¿Y por qué? (vs.42-45).
¿Eres oveja o cabra? Piénsalo y decídete pronto. Jesús vuelve.

Extracto del libro “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Mateo”

Por Edgardo Tosoni

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