Pasaje Clave: Esdras 9

Este capítulo, más que los anteriores, nos muestra el verdadero carácter de Esdras, sus actitudes y decisiones ante los problemas graves. Hasta ahora el liderazgo de Esdras venía “tranqui”, sin mayores complicaciones. Tenía un testimonio intachable, contaba con el favor y el respaldo del rey, tenía la carta que le abría todas las puertas, había logrado reunir y guiar a una gran cantidad de judíos deseosos de regresar a Israel, pudo contactar y reclutar a una importante cantidad de levitas y servidores para el Templo, el viaje de 4 meses no había generado ningún problema, todo el dinero para el Templo que traía desde Babilonia fue entregado sin que faltara una sola moneda y los gobernadores paganos le ofrecieron todo su apoyo. ¡Un éxito rotundo! ¡Un liderazgo impecable! ¡Un genio Esdras! ¡El líder que todos quisiéramos tener! ¡Todo bien con Esdras! Realmente Dios había sido bueno con él y con el pueblo. El tipo estaba feliz, inmensamente feliz… hasta hoy…

EL DÍA DE LAS MALAS NOTICIAS
¿Quiénes le comunican las malas noticias a Esdras y cuáles eran esas malas noticias? (vs.1-2)
¡Terrible! ¡Gravísimo! Porque en este grave pecado los que estaban metidos hasta el cuello eran los propios lideres de Israel. Los líderes religiosos (sacerdotes y levitas) y los líderes políticos (gobernadores y jefes de familias). Todo el liderazgo, sin excepción había pecado, ¡todos! Y, por supuesto, también la gente del pueblo. Obvio, “si el líder lo hace, yo lo hago”.

Si ellos se tatúan, yo me tatúo.
Si ellos ven Game Of Throne y me dicen que es buenísima (aunque esté llena de perversiones sexuales desde el incesto hasta la violación), yo también la veo.
Si ellos bailan en todos los cumple de 15 y en todas las fiestas al ritmo del “perreo” zarpadísimo y súper erótico, yo también bailo y perreo.
Si ellos van al Carnaval, yo también voy.
Si ellos tienen novias y novios no creyentes, (y sexo), ¿por qué yo no?
Si ellos no terminan sus carreras universitarias “por el ministerio, por el servicio a Dios”, yo tampoco.

Bueno… no debería ser así. No deberías “imitar” a tus líderes o pastores en aquellas cosas que Dios no aprueba, en lo que no te edifica, aunque sea “popular” hacerlo o algunos lo hagan. Independientemente de cómo vivan ellos tu meta tiene que ser agradar a Dios en todas las cosas, cuidar la santidad. Y si ellos mismos te tratan de “legalista” porque decides “no hacerlo”, “no participar”, es su problema y no el tuyo.

QUIÉN ES ESDRAS 3
¿Cómo reacciona Esdras ante semejante noticia? (vs.3-4)
Angustia, dolor, frustración, enojo, confusión, desilusión, vergüenza… sensaciones que se mezclan en el corazón de Esdras tratando de comprender lo que venía pasando desde hacía años. El linaje santo se había mezclado con las costumbres paganas de las demás naciones.
Como en la iglesia no hay chicas lindas, ¡las fueron a buscar afuera! Como en la iglesia todos los varones son unos bobos, ¡los fueron a buscar afuera!

Entonces, ¿qué hace Esdras? (vs.5-15)
Con toda su carga de angustia se humilla delante de Dios y ora. Así actúa un hombre de carácter, un auténtico macho. Antes de tomar cualquier decisión importante, antes de enfrentarse cara a cara con el problema, se presenta delante de Dios y habla con Él.
¿Y qué le dice Esdras a Dios? ¿De qué le habla? Veámoslo paso a paso:
1. El pecado. ¿Cuánto habían pecado los habitantes de Israel? (vs.6)
2. Las consecuencias. ¿Cuáles fueron las consecuencias de sus pecados? (vs.7)
Siempre, siempre, siempre, en menor o mayor medida, el pecado traerá consecuencias negativas.
3. La misericordia y nuevas oportunidades. ¿De qué maneras fue misericor- dioso Dios con ellos? (vs.8-9)
Siempre, siempre, siempre, sin importar la gravedad del pecado Dios traerá misericordia sobre nuestras vidas y nos dará una nueva oportunidad.
4. La desobediencia. ¿En qué fueron desobedientes los habitantes de Israel y todo su liderazgo? (vs.10-12)
5. Y de nuevo el pecado a sabiendas. (vs.13-14)
¿Entiendes ahora cómo funciona el círculo vicioso del pecado? Esdras acaba de describirlo perfectamente bien en su oración.

¿Qué siente Esdras y cómo lo expresa? (vs.15)
Angustia, dolor, frustración, enojo, confusión, desilusión, vergüenza… Pero Dios es justo, Dios es misericordioso, Dios es perdonador.

Extracto del libro “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Esdras”

Por Edgardo Tosoni

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