Un paquete de actividades para que los adolescentes sirvan a personas internadas en asilos, enfermas o discapacitadas.

“QUE TE MEJORES PRONTO” EN VIDEO

¿Algún miembro del grupo se encuentra en el hospital o enfrenta un período de recuperación largo en su casa? Organicemos una fiesta de helados en su honor y grabemos con una cámara de video a los adolescentes y adultos que asistan. Filmemos a los jóvenes haciendo cosas graciosas y también permitamos a cada uno la oportunidad de enviar un mensaje a través de ese video. Un pequeño grupo de amigos cercanos puede entregar el video personalmente. Este proyec­to fácil de realizar, económico y entretenido, le hará saber al enfermo que lo amamos, que estamos orando por él y que ver­daderamente nos importa. Podemos adaptar la idea para ani­mar a aquellos que se encuentran lejos por cuestiones de estu­dios o trabajo, o que se sienten solos. (Mark A. Simone).

NIÑOS CON NECESIDADES ESPECIALES

Interactuar con niños que presentan un retraso o que tienen parálisis cerebral, síndrome de Down, fibrosis quística, o leu­cemia, puede convertirse en una oportunidad conmovedora y única de crecimiento para los jóvenes de nuestro grupo. Hagamos que los adolescentes planifiquen una actividad periódica de comunión para estos niños.

Una vez al mes organicemos algún tipo de actividad (ver una película, dar un paseo, jugar, acampar) e incluyamos comida y refrescos. Por supuesto, necesitaremos una máxima colabo­ración de la clínica o agencia a través de la cual realizamos el contacto con estos niños. Estas actividades deberán ser ante­cedidas por una serie de reuniones introductorias con profe­sionales calificados que preparen a los adolescentes con las recomendaciones específicas para trabajar con cada necesidad especial y particular. Algunas iglesias han formado consejos ecuménicos y van rotando las actividades mensuales entre diferentes grupos de jóvenes. (Dodd Lamberton).

CAJAS DE VITAMINAS

Si alguien de nuestro grupo de jóvenes (o alguno de sus ami­gos) está confinado a su cama por una enfermedad prolonga­da, organicemos al resto de los chicos para que lleve cada uno un pequeño regalo a la próxima reunión; puede ser económi­co, pero con un lindo envoltorio. Coloquemos los regalos en una gran caja con un letrero que diga: «Vitaminas. Tómese una por día». Entreguemos la caja al paciente con instruccio­nes de solamente abrir un regalo por día. La idea es darle algo para esperar con alegría cada día, además de los tratamientos.

(Ralph Bryant)

ANIMALES CON GLOBOS

Los pacientes pediátricos de algún hospital cercano, sin men­cionar al personal de relaciones públicas y de piso del hospi­tal, seguramente se entusiasmarán con actos concretos de bondad que se lleven a cabo para los pacientes más pequeños. He aquí un gesto que nuestro grupo puede tener. Luego de haber obtenido el permiso que sea necesario por parte del hospital, fabriquemos animales simples con globos (leones, monos, tortugas) cada uno en su casa o juntos en la iglesia, para distribuirlos personalmente entre los pacientes menores. Para conseguir los globos especiales y sus instrucciones debe­mos visitar alguna tienda local de productos para fiestas. (Wayne Clame)

LÍDERES DE VISITACIÓN

Si queremos lograr que el grupo de jóvenes tenga visitas más enriquecedoras a hospitales, asilos y guarderías infantiles, designemos a un joven como responsable para cada una de estas cuatro áreas:

Oración. Encontrar voluntarios para:

  • La oración de apertura.
  • La oración de cierre.
  • Otras oraciones, de ser necesario.

Escrituras. Encontrar a alguien para que:

  • Escoja un pasaje.
  • Realice un breve comentario antes de leerlo.
  • Destaque un punto del pasaje y lo comente luego de su lectura.

Música. Ubicar personas que se encarguen de:

  • Seleccionar canciones apropiadas.
  • Llevar al lugar suficientes cancioneros.
  • Encontrar uno o varios músicos.
  • Encargarse del sonido.

Regalos. Encontrar una persona que:

  • Consiga los regalos adecuados.
  • Consiga o fabrique tarjetas adecuadas, con unas pala­bras de cariño.

Logre que las tarjetas sean firmadas por el grupo y presente los regalos de parte del grupo. (Daniel C. Broadwaier)

FOTÓGRAFO OFICIAL

Si algún miembro de tu grupo de jóvenes tiene alguna discapaci­dad física que le impide participar de ciertos juegos y actividades, comprémosle una Polaroid o algún otro tipo de cámara instantá­nea. Enseñémosle a utilizarla correctamente y luego nombré­moslo fotógrafo oficial del grupo de jóvenes. Siempre que el grupo se reúna, este joven tomará fotografías y el resto se apiña­rá a su alrededor para ver cómo salen. Esto ofrece a una persona una buena oportunidad para atraer la atención sobre sí y para sentirse necesitada y apreciada, ya que de otro modo sería olvi­dada y dejada de lado. Las fotografías luego pueden ser coloca­das en la cartelera del grupo de jóvenes. Asegurémonos de emplear una cámara instantánea, por razones obvias. De otro modo los resultados no son los mismos. (Edie Owen)

JARDINES EN ADOPCIÓN

Esta es una idea que puede hacernos crecer. Propongamos a nuestro grupo de jóvenes adoptar jardines de asilos, personas enfermas u hospitalizadas, o personas mayores, para que cul­tiven algunas verduras y hortalizas en ellos. Entreguemos a los chicos las semillas y alentémoslos a que ellos pongan las herramientas y la fuerza muscular. Podemos preparar el terre­no, plantar, cultivar y finalmente cosechar los alimentos, todo para las personas que son dueñas de los jardines pero que no pueden, por supuesto, realizar el trabajo. Eso produce una maravillosa interacción entre distintas generaciones. Son especialmente útiles aquellos jóvenes que saben de granja, biología o de la naturaleza en general. Los novatos pueden aprender rápido también.

Una adaptación de esta idea incluye a otras personas de la congregación. Cuando anunciemos la campaña «Jardines en adopción», invitemos a otras personas que ya tengan pequeñas plantaciones en sus jardines a que aparten una o dos hileras de cultivo para ofrendar los productos a las personas que padecen necesidad. También aquí los jóvenes pueden entregar las semillas y encargarse de repartir lo producido a los necesitados. Esta idea puede encajar perfectamente dentro de un programa a largo plazo de concientización sobre el hambre. (Jeremy Pera y Note Costeas).

VISITAS CON CANCIONES

Un modo de transmitir gozo a las personas que están enfermas o internadas en asilos consiste en visitarlas y cantarles canciones. Los jóvenes pueden visitar las casas para cantarles canciones y tal vez incluso preparar comidas para disfrutar junto con los residen­tes. Esta actividad es ideal para incorporarla a otros proyectos de servido como realizar paralelamente ciertos trabajos en las casas de estas personas. Por ejemplo, el ministro o pastor puede acom­pañar al grupo de jóvenes para administrar la Santa Cena en las casas de personas que no pueden asistir a la iglesia. Por medio de cintas de audio y reproductores conseguiremos llevar cultos de adoración y mensajes a aquellos que no pueden salir de sus casas. (Denise Tumer).

FIESTA DE DULCES

Pasemos con nuestro grupo de jóvenes toda una tarde prepa­rando maíz inflado, galletas y otros dulces. Luego repartamos los dulces en un orfanato, hospital, o guardería infantil. También podemos realizar este servicio en Navidad o en otros días especiales. (Corinne Bergstom).

Extracto del libro Campamentos

Por Autores Varios

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