Pasaje clave: Éxodo 24 al 27 y 30.
Medidas, cortinas, tablas, argollas… No vamos a darte un curso acelerado de arquitectura ni de corte y confección, pero si vamos a tratar de ayudarte a entender el importantísimo significado espiritual que se esconde detrás de tantos objetos, colores y materiales.
Todo lo relacionado con el tabernáculo, que Dios le ordenó construir a Moisés en el desierto para tener comunión con ellos, representa o simboliza algo de la vida perfecta de Jesús. ¡Sí! Ese tabernáculo era como un anticipo que Dios le daba a su pueblo de lo que seria (cientos de años después)la vida y la obra de Cristo.
Sabemos que te resulta muy pesado leer estos capítulos y muchos mueren en el intento, por eso utilizo cuadros comparativos que te hagan más sencilla la lectura e imágenes y esquemas para que entiendas lo que lees.
El atrio del tabernáculo (su perímetro total) media 50 metros de largo por 25 metros de ancho. Sus paredes eran de cortinas blanquísimas de 2,5 metros de altura sostenidas por columnas.
Veamos sus significados:
1. La Entrada: Su única puerta era una cortina de 10 mts de ancho, en la cual estan los 4 colores. Es llamada el Camino. Jesús dijo: “Yo soy la puerta” y “yo soy el camino”. Únicamente por medio de Él podemos llegar a Dios.
2. Las Columnas: Los postes eran de madera de acacia, con un tope (capitel) de plata en la parte superior.
La base era de bronce. Se sostenían con cuerdas de pelo de cabra desde el tope hasta una estaca en el piso, enterrada hasta la mitad.
Poste: Jesús el hombre perfecto, incorruptible.
Capitel: Jesús el Redentor.
Base: Jesús el Salvador.
Cuerda: Él fue hecho pecado por nosotros.
Estaca: Sufrió, fue enterrado, pero resucitó.
3. Los Materiales: Oro (divinidad y gloria).
Plata (redención. Utilizada como medio de pago para un rescate).
Bronce (sufrimiento y fuerza).
Madera de Acacia (no se pudre ni se corrompe. Es símbolo de humanidad porque crece de la tierra).
Azul (lo celestial).
Lino blanco (pureza y justicia).
Púrpura (realeza).
Escarlata (una variedad de la púrpura).
Pelo de cabra, pieles de carnero (teñidas de rojo) y pieles de tejones.
Oro: La gloria y divinidad de Jesús.
Plata: Jesús nuestro Redentor.
Bronce: Sufrió y soportó el juicio de Dios por amor a nosotros.
Madera: Jesús el hombre perfecto.
Azul: Jesús, hijo de Dios (Juan).
Blanco: El hijo del Hombre (Lucas).
Púrpura: Jesús el Rey (Mateo).
Escarlata: Jesús el siervo (Marcos)
En las pieles de cabra, carnero y tejón vemos a Jesús derramando su sangre en medio de la fealdad de su muerte en la cruz.
4. El Altar del Holocausto: Era lo primero en verse al entrar. Era de madera recubierto con bronce. Allí se sacrificaban los animales, como ofrenda por el pecado. El fuego del altar quemaba y consumía todo. Cada vez que alguien pecaba debía ir con un cordero y sacrificarlo.
Cristo se sacrificó en el “altar” de la cruz para perdonar nuestros pecados y derramó su sangre para limpiarnos. Él como hombre sin pecado, soportó en nuestro lugar el juicio de Dios (simbolizado por el fuego). Cada vez que pecamos podemos ir a Jesús para ser limpios.
(CONTINÚA…)
Extracto del libro «Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Éxodo-Levítico»
Por Edgardo Tosoni
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