Pasaje Clave: 1º Reyes 2:26-46.
UNA LISTA NEGRA
Inmediatamente comienza su reinado, Salomón ejecuta las órdenes de su padre, el rey David. El traidor y desleal Adonías ya está muerto. Benaías se ocupó de él (vs.25).
¿Quién es el siguiente en la lista “negra”? (vs.26-27)
El sacerdote Abiatar se mantuvo fiel a David desde la época en la que él huyó de Saúl hasta el día en el que tomó la equivocada decisión de aliarse a Adonías traicionando al rey. ¡Qué pena! Eligió el bando equivocado. Y si bien Salomón le perdonó la vida, lo desterró para siempre.
Una decisión equivocada, una palabra fuera de lugar, una actitud negativa, cosas que deberías haberte callado y las dijiste o escribiste impulsivamente, pueden estropear todo lo bueno que viniste haciendo hasta este momento. Tristemente lo que más se recuerda es lo último que hemos hecho o dicho mal, y muchas veces eso borra de un plumazo todo lo que hicimos bien.
Me gusta pensar que Dios nos perdona, que Él vuelve a darnos nuevas oportunidades y que nunca cierra el acceso a su presencia real por más que la hayamos embarrado. Tal vez las personas ya no nos vean igual, nos señalen, nos critiquen, nos juzguen o nos cierren sus puertas, pero el trono de los cielos sigue abierto y liberado el camino hasta la presencia del Rey de reyes para que vayamos, nos acerquemos y adoremos. Dios no te destierra nunca… no te cierra las puertas… no importa lo que hayas hecho.
¿Quién es el próximo en la “lista negra” de Salomón? (vs.28-29)
Te explico algo para que lo entiendas. Entrar en el tabernáculo y agarrarse de los cuernos del altar era una manera de pedir refugio, protección, para no ser muerto. Sin embargo Salomón rechaza la acción de su primo hermano Joab porque él era un asesino. Joab había asesinado a sangre fría con una actitud muy cruel y vengativa. (Puedes leerlo en “Desafíos para Jóvenes y Adolescentes: 2º Samuel”).
Por lo tanto, la orden de Salomón fue terminante (vs.31-33). Mira las expresiones que usa en contra de Joab:
- “La sangre que ha derramado injustamente” (vs.31).
- “Dios hará volver su sangre sobre su cabeza” (vs.32).
- “Él ha matado a dos hombres mas justos y mejores que él” (vs.32).
- “La sangre caerá sobre la cabeza de Joab y sobre su descendencia para siempre” (vs.33)
Con el destierro de Abiatar y con la muerte de Joab, ¿a quiénes elige como sumo sacerdote y como general de sus ejércitos? (vs.35)
Salomón elige a los “guardianes del reino” (Día 2). Ellos habían sido leales a David hasta el día de su muerte, por lo tanto le serían leal a él a lo largo de todo su reinado.
Rodéate de amigos leales. Mete en tu vida amigos fieles, amigos que te sumen positivamente, que te cuiden, que te adviertan, que te aconsejen con inteligencia de acuerdo al corazón de Dios. Mantén cerca tuyo a la gente de bendición, a los íntegros y honestos, a los que te hablan palabras de fe y te alientan a seguir creciendo. Pero aléjate de los aprovechadores, de aquellos que sólo quieren sacar ventajas y beneficiarse con lo que puedas darles.
¿Quién es el último en “la lista negra” de Salomón? (vs.36-37)
Simei significa “famoso”. Nació con ese nombre pero como no había Tele en esa época para “saltar a la fama” sin mucho esfuerzo, lo hizo persiguiendo al rey David, insultándolo de pies a cabeza, tirándole cascotazos y maldicién- dolo de la forma más violenta. (Léelo en “Desafíos para Jóvenes y Adolescentes: 2º Samuel”).
El muy ingenuo pensaba que podía maltratar públicamente al rey y que nadie lo recordaría. ¡Famoso y tonto! Una muy mala combinación.
Salomón inicialmente le perdona la vida pero bajo amenaza de muerte: “Si sales de tu casa en Jerusalén, te mueres”. No era un mensaje muy difícil de entender (vs.38), pero Simei fue tan necio, tan tonto retonto, que desa- provechó completamente la oportunidad que Salomón le estaba dando de conservar su vida hasta la vejez.
¿Qué hace el tonto de Simei? (vs.39-40)
¿Y qué sucede cuando Salomón se entera? (vs.41-46)
Fin de la historia. Un “famoso” menos en el mundo.
Piensa en lo siguiente: ¿Quiénes son los enemigos que tienes que quitar de tu vida? No me refiero a personas (bueno, tal vez sí, tal vez estes metido con la gente equivocada), me refiero a hábitos, a conductas, a pensamientos negativos que te lastiman y te gobiernan. Dios quiere afirmar tu vida y bendecirte como lo hizo con Salomón, pero tienes que renunciar a lo viejo, tienes que arrancar de tu corazón a los Adonías, a los Joab, a los Simei, a todo aquello que te enfría y te aparta del propósito que Dios tiene para ti.
Extracto del libro «Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: 1º Reyes»
Por Edgardo Tosoni
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